Gabriela Collado

Terapeuta Holística. Maestra Espiritual. Coach en Relaciones. Terapia PNL. Transgeneracional. Biodescodificación. Risoterapia. Reiki Master. Terapia Metamórfica. Registros Akashicos. Tarot Evolutivo. Canalizaciones. Terapias y Talleres Vivenciales (Presenciales y On Line). Conferencista. Seminarios Motivacionales.

martes, 28 de septiembre de 2021

¿Obediencia o respeto?




Ser demasiado obediente impide crecer. La obediencia por sí sola, sin una sana confrontación, impide el discernimiento y con ello el desarrollo y la evolución del ser. Se acaba buscando un espacio de libertad que ocurre sólo en la mente o se recurre a la violencia o a la sumisión, de algún modo la acción hacia la propia libertad se atrofia ante el miedo a desobedecer, a salirse de las normas establecidas a dejar de pertenecer. Lo otro es la asertividad: autoafirmar los propios derechos sin manipular ni dejarse manipular.
No confundas respeto con obediencia. El primero ha de incluirte, es sumamente importante que te respetes, respetes tus límites y derechos, lo contrario te priva de tí mismo, te lleva obedecer normas, estructuras y creencias ajenas por sostener una paz que acaba saliendo demasiado cara, que castra tu esencia, tu ser.
Dice Richard Feynman:
"El problema no es que la gente carezca de educación. El problema es que las personas están lo suficientemente educadas para creer lo que se les ha enseñado, pero no están lo suficientemente educadas para cuestionar cómo ni qué se les ha enseñado."
"Demasiado cuerdos, demasiado rectos, demasiado muertos. Esa es la verdadera demencia. De-mente, sólo allí viven, en la mente."
Elohim

⚜ Gabriela Collado

jueves, 16 de septiembre de 2021

Un instante mágico




Mientras me reoriento y me restauro poco a poco, te invito a enfocarte conmigo en el presente del presente. Que no se nos escape eso que ya no tiene vuelta atrás y, aunque una parte de nosotros siga en el andén de las promesas futuras, todo lo que creemos esperar podemos hallarlo aquí y ahora, en los minúsculos gestos y detalles de nuestro mundo, donde todo nos está esperando.
Cruzamos el escenario de nuestra cotidianeidad como si estuvieramos solos, como si la vida fuera un camino progresivo hacia lo indolente, sin testigos de las diminutas faltas que escondemos. Y nos sentimos abandonados mientras negamos la intimidad compartida con cada rincón "archigrabado" en las retinas.
¿Has sentido la cadencia de tu propia voz, la vibración de soprano o de tenor que guarda tu precioso juego de cuerdas? Dime que has notado la suavidad con que la esponja cede a la forma perfecta de tu mano y cómo el pestillo de la ventana tiene el poder de concederte el aire o la libertad.
Cada cosa está esperándote de forma silenciosa y diligente; están ahí para ti con una familiaridad estremecedora y vasta.
Los pasos como guías del porvenir, las puertas que te invitan a atreverte y el pequeño móvil en tu mano como un hilo dorado de una red inmensa que te sostiene.
Bajale el volumen a tu soledad y observa cómo las cucharas olvidan su engreída distancia abrazándose unas a otras en el cajón.
Seguro que, finalmente, ya te diste cuenta lo bueno que hay en ti y, como hace el gato y cada criatura de este bendito mundo, sin un ápice de duda, te permites ser tú mismo.


Gabriela Collado

domingo, 12 de septiembre de 2021

¿A dónde te vas a llevar el amor que no des?




Voy a contarte una cosa que en el fondo ya sabes, estamos más unidos de lo que creemos y comprender eso nos devuelve al hogar ancestral del que venimos. Hemos venido a experimentar como sería que hubiera un afuera y, en ese juego, nos hemos perdido. Pero no fue un error en absoluto porque, ese perdernos, nos esta permitiendo reencontrarnos. El camino del Amor está cargado de sencillez, una simpleza honda que emociona. Porque en la partícula más elemental de la vida es en donde nos encontramos vos y yo, sin circunloquios ni posturas ni grandilocuencias. Cuando uno quiere decir y expresar verdaderamente amor se queda mudo, se mira a los ojos y no salen las palabras, porque no caben, pierden todo sentido. En la sencillez de la mirada, de la mano rozando otra mano, del crujido silencioso de la vida que crece, en una minúscula lágrima. Allí está lo grande. Y esta allí porque es precisamente el lugar en donde permitimos que se produzca el encuentro. Porque lo demás, lo artificial, los adornos sabihondos y santurrones son al final los que crean los abismos.
Gracias a esa mano y gracias a vos que me das vida a través de tu mirada. ¡Sí, vos que estás leyendo!


Gabriela Collado

miércoles, 8 de septiembre de 2021

El drama de la sufridora




No se puede medir todo de acuerdo al resultado. Si, sí, es algo que nos enseñaron en este mundo competitivo. Pero no. Es frustrante, tremendamente frustrante. No puedes decir que algo salió mal porque no salió como querías. Y (ESTO ES IMPORTANTE), sobre todo, no puedes pensar que "lo hiciste mal" porque el resultado no fue como esperabas. ¡No lo hiciste mal! Simplemente no era, no tenía que ser, no era el momento.
Aquí hay una lección súper importante de la vida: NO CONTROLAMOS NADA. ¡Suelta el control! Suelta el control de lo que no te corresponde, de lo que no manejas tu. Es demasiado pesado hacerse responsable a uno mismo sobre asuntos que no dependen de nosotros.
A veces, la gente hiperresponsable (me incluyo), se siente la causante de todos los males que la rodean (ojalá nos sucediera lo mismo con lo bueno). Y no, es too much! Generalmente, el exceso de responsabilidad proviene de personas muy autocastigadoras (o viceversa), perfeccionistas en extremo y, ¿qué es eso? ¿No es, acaso, el miedo a no llegar? Si todo el tiempo estoy exigiéndome la perfección en algo y, al mismo tiempo, me autocastigo cuando no la alcanzo (recuerda que te estás midiendo con un imposoble) ¿no será un autosabotaje porque creo que nunca seré capaz de lograr algo por mí misma?
Pensalo, yo te acompaño.

Gabriela Collado

sábado, 4 de septiembre de 2021

El hogar es el corazón




Lo importante es que recuerdes el hogar.
No importa cuantos viajes hagas a la luz o a la oscuridad, sino que sepas a dónde regresar cada vez. Ese es el gran viaje y cada pequeño viaje de experiencia.
Como la parábola del hijo pródigo, no hay castigo por alejarse del hogar sino felicidad por el regreso.
El hogar es el corazón, es el lugar de ti dónde te sientes en paz cuando te alejas de tu centro. No te castigues por ello, sé el padre benevolente que celebra el regreso.
Abrázate, te echabas de menos.


Gabriela Collado

miércoles, 2 de junio de 2021

Kate no quiere Photoshop




Transcurre la vida, sin filtros. Huelo la hierba recién cortada tras una noche de lluvia y voy a preparar café. ¿No será demasiada embriaguez perfecta para tan poca mañana? Después de un sueño imperfecto por culpa de un desesperante anhelo sin filtros en mi cabeza, con el cuerpo hecho nudos por aquí y por allá, las ojeras de todos mis antepasados reunidos bajo mis ojos, el pelo anidando pájaros imaginarios y los párpados reclamando su autonomía, tiro de mí misma hacia lo que queda del día, que transcurrirá sin filtros ni preavisos y, a veces, sin demasiada clemencia. No hay tiempo para preparar la vida porque la vida es el mismo tiempo, que ignora nuestros inútiles rituales a cambio de su compasión. Cronos castrando a Urano, el tiempo que aplasta lo imprevisible, ese anhelo de libertad que los humanos guardamos tras el sueño del libre albedrío. Cronos temido, incomprendido, despreciado, sigue entregándonos el regalo más valioso de este mundo, el tiempo. ¿Quién puede engañar a este leal hijo de Gea? No hay escondite libre de él, pero sí hay una perfecta vida sin filtros. Sin filtros en el cuerpo, sin filtros en la lengua, sin filtros en los ojos, sin filtros en el corazón. ¡Qué bastarda ignorancia no reverenciarle, no hacer digno su presente constante! ¿De qué te proteges pequeño humano? ¿Puedes esconderte del tiempo? ¿Acaso puedes burlar al amor? ¿Qué te asusta tanto alma mía? Te destrozas las manos queriendo asir lo inasible. Es verdad, el tiempo como como concepto asible en sí mismo no existe pero, no te engañes con artimañas de tu mente, porque existe en tanto que es sostenido por la emoción que pretendes burlar. La vida siempre fue mejor sin filtro, a vértigo puro de enfrentarse a uno mismo a cada instante. No te escondes del tiempo, amor mío, te escondes del reproche de abandonarte a ti mismo, del miedo a no reconocerte. ¿Quieres saber la verdad? Aún puedes hallarte si quitas todos los filtros. Sí, hay tiempo. Es tu regalo.
⚜ Maga
Recomiendo muy especialmente la serie Mare of Easttown,.principalmente por el papel protagonico extraordinario de una Kate Winslet sin filtros. ¡Humana!

sábado, 22 de mayo de 2021

No hay tiempo para no amar




No hay tiempo para no amar. ¿Todavía no lo entendiste? ¿A qué estás jugando? Estás drogándote con sustitutos del amor. No hay mejor droga que el Amor, capaz de cambiar en un instante tu percepción de la realidad. Mira, todos necesitamos historias que nos inspiren, personas que nos inspiren, amores que nos inspiren y a veces también, sin saberlo, nosotros somos la inspiración de alguien. Pero una inspiración tiene que ser eso que te empuja hasta el borde para que te lances a la vida. Entiende, no es malo tener miedo, lo malo es que el miedo te tenga a ti. Me gustaría que vieras lo hermoso que es poder ser tú mismo, aún contigo mismo. Alguien con quien puedes ser tú, es alguien que sabe amar. Sé que muchas veces te juzgas por haber pretendido ser feliz y soñar que esta vez sí, la felicidad, la que es para ti, la que siempre fue una promesa. Pero olvida el jamás, jamás es una palabra muy lejana. A veces se tarda en soltar lo que duele porque sabemos que si nos vamos no volveremos y es por eso que duele más emprender el regreso a uno mismo. Quiero que entiendas que nada es un evento aislado si no que forma parte de una red compleja de acontecimientos, un tejido de causas que provocan efectos y que, a su vez, generan nuevas causas. Nunca es nunca jamás, nunca es el fin. ¿Quieres caminar junto a mí y que no sea un sueño? Déjame salir de tu cabeza y víveme.
Gabriela Collado

miércoles, 19 de mayo de 2021

Cuando soy Amor

 


Muchas veces, cuando la mente quiere entender algo, lo destruye. Nadie llega a la verdad intelectualmente. La verdad se descubre haciéndose añicos, revelando de qué átomos estamos hechos, reordenando las partes, llorando los pedazos perdidos y creando del barro los nuevos. Uno ama amando no fantaseando sobre el amor. No es la idea del amor la que nos transforma, es revolcarme dentro, tocarlo y dejarme tocar, el vértigo y el pavor de soltar cualquier forma, necesidad, seguridad, creencia. Es decir sí a las ganas de estar vivo. Solo puedo sentir la vida traspasando a través de mí cuando amo y me dejo amar. Ninguna vida merece vivirse con miedo. Finalmente, sólo soy cuando soy amor. 

 


Gabriela Collado

martes, 18 de mayo de 2021

La única libertad es adentro



Nací en un mundo que ya era de otros, que no me pertenece. No nací libre. Vos tampoco. Y, en la medida en la que he ido creciendo, me he vuelto menos libre. Siempre me he peleado con esto. Nunca lo acepté. Me negué a creerlo. Me enajena la falta de libertad. La tuya también. Me persigue esa palabreja desde apenas pasada una década en esta Tierra. En el último tiempo he observado, además, que empeora. Que todo cuanto construye el hombre es para encadenarlo. Que, para sumar más jolgorio, la gente pide más limitaciones a su albedrío porque la seguridad es imaginada por el miedo. ¿Por qué las personas tienen la manía de esperar que un otro los cuide cuando ni siquiera han conseguido que los ame?

Nací en un mundo en donde la libertad y el amor tienen condiciones, más condiciones y más condiciones, como las puertas del cuartel de CONTROL del superagente 86. No sabemos lo que es ser verdaderamente libres. Libertad es la palabra más mentirosa que existe.
Puede que hoy te hable desde mi lado oscuro y comprendí hace tiempo que también debo dejar que se exprese. El claroscuro nos hace. Y perdóname si te arrastré conmigo al suburbio de la distopía.
Aún así, he comprendido que la única libertad posible está adentro. Paradojas de la vida en este planeta.
A lo mejor tenga que aprender a vivir con eso y esa sea la grieta al vuelo.

Gabriela Collado

sábado, 15 de mayo de 2021

Del amor pensado al sentido


Cuando llegas al corazón comprendes que la cabeza no tiene demasiado sentido, más que como herramienta para llegar a él. Por eso se vive como un pánico a la muerte. Tu cabeza se vuelve en tu contra porque le aterra que la reemplaces por el amor. La noche oscura del alma es la transición que permite esta alquimia; quizás la única válida del ser humano, es para eso para lo que mereció la pena encarnar y permanecer vivos.

Por esto mismo, tu mente te dirá que el amor es una utopía, porque teme perderte. La mente siempre se identifica con el miedo y por eso no puede realmente comprender el concepto del amor.
Es como si tuviéramos que vivir primero un amor pensado para luego (en el mejor de los casos) llegar al amor sentido. A veces esto ocurre en un lapso corto de tiempo, a veces son años, a veces es con la misma persona y a veces con otra.

Gabriela Collado
Procesos Terapéuticos

jueves, 6 de mayo de 2021

El amor más hermoso que he conocido




Hay cosas que son tan bellas que duelen. En serio. Esbozo una sonrisa, no sin cierta condescendencia, cada vez que alguien usa la palabra amor como si fuera un pasaje al País de las Maravillas. El amor más hermoso que he conocido me ha raspado hasta los huesos, me ha roto y vuelto a recomponer, me ha dejado llorando, aún lágrimas de un dolor dulce, me ha revolcado durante días en mi propia oscuridad, me ha mostrado la belleza del miedo del otro que se desnuda vulnerable frente a mi, me ha dejado sin respuestas, a veces sin preguntas, muda y deshollada, me ha hecho resollar aceptación, me ha vuelto rebelde e impertinente, me ha arrojado al hoyo de la humildad más absoluta. El amor duele. Entiende lo que digo. El amor, el de verdad, es una sacudida de luz tan enorme que no puede si no descubrir tus propias miserias, tu soberbia, tu vana ilusión de control. El amor te eleva a la mejor versión de ti mismo, aunque sea durante un instante; suficiente para que regresar a tu pequeño trozo de vida ordenado duela que te cagas. ¿Qué digo? Duele casi a morir. Duele si no te dejas atravesar por él, si no te transformas con él. El amor, el real, es tan jodidamente verdad, que te deja aturdida, alelada, carajeando con tus ingenuos argumentos inservibles. Quieres correr desesperada, refugiarte en lo de siempre, camuflarte con un maldito árbol, pero el amor, el condenado tsunami del amor, ya te tocó y todos los arcoíris en los que habías creído hasta ahora se volvieron grises comparados con su resplandor. Esa luz que está en sus ojos, en sus palabras, en su tacto, en el aire que lo envuelve. El amor te llama, te renace, te reinicia, pero no negocia con tus intentos de encajar tus miedos. Más los quieres colar, más duele. Y sí, si has visto su rostro nunca volverás a ser igual. Tan luminoso eres que te asustas de ti mismo. Eso hace esta fuerza tremenda. Te rompe entero, te arrastra, te destroza, te aniquila, te mata... a ti no, a tus mentiras. El amor te empapa gota a gota o en diluvio. No puedes negarlo. Nada hay más real que lo que te moja. El amor solo quiere de ti una cosa: ama.

domingo, 2 de mayo de 2021

Los cinco cuerpos que nos componen






Mis cuerpitos se comunican entre sí, y los tuyos también. A veces lo hacen mientras dormimos, porque es cuando el cuerpo mental suelta el control. Si no hay incoherencia entre ellos, funcionarán estupendamente, pero, en cuanto algo se descoloca y lo que pienso no coincide con lo que siento o digo o hago o creo, entonces ¡zas! llega el síntoma.
Anoche mi cuerpo físico tenía el estómago revuelto en un puño, indigesto, así que le reclamó al cuerpo emocional: "¿qué te pasa?" "Pasa que, aunque el cuerpo mental se haga el loco diciendo que no pasa nada, yo no me trago lo que pasó." "Bien, vamos a pedirle al cuerpo mental que sea coherente y se alinee." Entonces, ahí, en mitad de la noche, los tres formaron una alianza a mi favor. La mente comenzó a dirigir a la emoción hacia el alivio del dolor. "¿Sabes? No importa si te duele, es normal, deja salir la angustia que se atasca en tu estómago, es la vida que a veces se atora. Vamos a digerir esto juntos." Y, así, todos los cuerpo se sintieron escuchados, tenidos en cuenta, respetados en sus tiempos y vivencias y el dolor pasó.
Tenemos esta posibilidad siempre al alcance de nuestra mano, todo depende de cuan coherentes estemos dispuestos a ser y afrontar lo que nos sucede, en lugar de escondernos.
Son cinco los cuerpos que nos componen (mental, emocional, físico, energético y espiritual). Éstos han de estar en equilibrio para no enfermar y esa es nuestra responsabilidad. Si esperamos a enfermar y luego queremos una pastilla mágica, estaremos desoyendo a alguno de nuestros cuerpos y habrá desequilibrio.
En estos movimientos energéticos que se suceden hacia la ascensión a 5ta dimension junto con la Tierra, nuestro cuerpo está adaptando su biorritmo, los pensamientos están cambiando, la frecuencia del planeta también y esto nos afecta provocando agotamiento y ciertas incomodidades. Eso no significa que no debamos hacernos cargo de nuestras incongruencias, pero debemos comprender que somos un todo indivisible y que, si una parte no cumple su tarea y se hace la loca, afectará al resto.
¿Qué parte de tí no estás escuchando? ¿Cuánto silencio te permites para escucharte? ¿En dónde estás yendo hacia donde no quieres ir?
Ama el proceso de la vida. Cada cosa requiere su tiempo, su atención, su propia energía. Conocerte es amarte.

Gabriela Collado
Acompañamiento en Procesos Evolutivos y de Autoconocimiento

lunes, 26 de abril de 2021

Que me importe lo importante




Antes quería que me importara menos lo que tanto me importaba. Ahora quisiera que me importe más lo que ya no me importa. Es como si se me hubieran caído todos los manuales de la vida en medio de un vendaval, se hubiesen desparramado sus hojas y, al juntarlas, se hubieran mezclado lo importante y lo superfluo. ¿Cómo vamos a ordenarlas? Sería tarea imposible e infructuosa y, además, carente de sentido. ¡A la mierda los manuales! Ya no hay manuales y ahora la vida ha de volverse intuitiva, como los nuevos teléfonos móviles. La verdad es que a veces tengo dudas de si no me importa lo que debería, de no darme cuenta si es que no me está importando lo importante. A lo mejor lo importante es no darme cuenta o dudar. Y, sinceramente, me importa un pito. Me importa lo que me importa ahora, lo que me llena, lo que me inspira, lo que me coloca de mi parte. ¡Qué miserable manía la de pensar por los demás! Romperse por los demás, encajar en sus pequeñas aspiraciones. No me malinterpretes, aunque tampoco me importa, no saldré a repartir maldades y egoísmos a diestra y siniestra, ya hay cupo para eso, simplemente estaré del lado del que le importe importarse, del que le importe un pepino la versión deluxe de la vecina del cuarto, del que se arriesgue a vivirse. Es que, para encajar en la Cajita Feliz de un payaso diabólico que cuenta monedas a costa de mis alas rotas y sangrantes, rebozadas y con salsa barbecue, paso. No puede importarme menos todo aquello que va contra natura, lo que exige de mi incoherencia para sostenerse, lo que no nutre el alma, lo que tuerce las sonrisas y detiene la música. Me importan tres carajos las falsas seguridades hechas para entrar en cajas de madera de abedul. Seguramente todavía me venga importando algo que ya no debería importarme. Todo a su tiempo. Lo importante es que me importe lo importante que no es mucho y sencillito: lo que me hace sentir viva.

Gabriela Collado

jueves, 22 de abril de 2021

¿Quién va a prepararnos para el amor?




Nos han preparado para lo mediocre y asesinado la belleza, tanto, que nos cuesta creer que el paraíso es posible aquí y ahora.
¿Cuántos aman realmente la verdad?
Es más fácil enseñar el pesimismo que el optimismo. Es más fácil convencer del miedo que de la eternidad de la vida.
Veo lo que creo que es verdad, no la verdad.
Cuántos maestros ignorados y asesinados porque me resulta más cómodo lo mediocre. Se me acomoda mejor la ignorancia colectiva. "Mal de muchos, consuelo de tontos."
Inspirar es tomar aire. Inspirar es volver a nacer en cada instante. La inspiración es beber de la fuente original que me da vida.
¿Qué me inspira? ¿Para qué vale la vida respirar?
Es difícil respirar en un mundo que quiere dejarte sin aire. Que te reprocha si quieres más. "¡Con qué poco nos conformamos!", me decía mi madre, como si fuera meritorio.
Quiero la excelencia de Dios, su belleza, su abundancia, su amor, su presencia, su aliento absoluto. Está ahí para mí, para ti, ahora. No vine a estar muerta. Vine a expresar su grandeza.
Yo Soy Él. Yo Soy Eso.
¡Eh! ¿A dónde vas? ¿Quién te has creído que eres para pensar por ti misma? ¿Para pedir lo mejor?
Aún no hemos comprendido la hondura de su enseñanza. Y, así, seguimos asesinando al mensajero porque no tenemos el valor de revelar en nosotros el poder de su mensaje.
Nos convertimos en el brazo del dictador que nos somete para callar al otro, para seguir dormidos. ¿Qué así duele menos? ¿Por qué compras dolor?
¿Quién va a prepararnos para el Amor?

Gabriela Collado

martes, 20 de abril de 2021

Ojalá no te debas nada




Nos enseñaron a aceptar nuestras condiciones con resignación a fin de mantener el status quo.
Nos inculcaron mantener estructuras que nos hacen infelices, a costa de sostener a todo un sistema.
El individuo desaparece, no en pos del beneficio colectivo, sino de la resignación mutua que se pasea indolente por las calles grises.
No nos enseñaron a incluirnos en el bienestar. ¿Soy feliz? ¿Es aquí donde deseo estar?
¿Tiene sentido sostener una infelicidad personal en sacrificio de un sistema mayor?
Me sacrifico, muero en vida, me anulo para que la rueda indolente de lo establecido no se detenga.
¿Qué sería lo otro?
¡Egoísta! Te gritan cuando dejas de darles lo que esperan de ti.
¿Sabes qué? Ojalá no te debas nada, a ti. No importa si lo que te hace feliz no es lo que yo quiero. Importa que estés en aquel lugar donde puedes ser tú en tu máxima expresión y expandirte.
Me dirás ¿existe eso? ¿Se puede realmente? ¿Quién lo ha conseguido? Creo que se puede y, si aún no del todo, al menos es a lo que deberíamos aspirar. Lo contrario es fomentar una sociedad de frustrados, tristes, infelices.
¿Quién puede dar calidad a los que ama si no es capaz de desplegar su ser para dar su mayor luz?
Ojalá no te debas nada, para que puedas darlo todo sin abandonarte.
El sacrificio es hacer sagrado lo que tocas, no apagarte para que otros puedan estar tranquilos.
¿Crees que Jesucristo se anuló? Creo que si lo hubiera hecho se hubiera quedado en un lugar cómodo en donde no fuera perseguido. Por suerte para la humanidad, derramó todo su ser y su luz sobre esta Tierra.
Alguien me preguntó cuándo se le pierde el miedo a la muerte.
Cuando no te debes nada.
Pero para eso debes saber quién eres.

domingo, 11 de abril de 2021

El Yo es Dios experimentando la materia





No concibo a Dios separado de las cosas. En mi cosmografia personal no existe un dios inalcanzable y selectivo.
Es la fuerza Viva que todo lo toca.
Es la Verdad que subyace bajo cada creación.
Recuerdo que cuando mi hija era pequeñita se negaba rotundamente a decir la palabra Dios porque creía que era una mala palabra. No era para menos, creciendo en una cultura que para insultar usa esa misma palabra.
No estoy hablando de religión, hablo de algo más sagrado, más profundo, sin las formas distorsionadas de lo mundano.
Sin esa conexión, la vida nos es ajena. El destino nos arrastra desde la inconsciencia, de manera indolente.
Conectar con la corriente divina del Tao hace imposible que no amemos la vida.
Somos el mismo Dios experimentando la belleza de estar vivos a cada instante.
Gabriela Collado